No solo nos sorprenden con fotos en Instagram dignas de un premio a las Bellas Artessino que también lo hacen a la hora de frecuentar restaurantes. Y es que pese a su corta edad, tal cual determinó un estudio de Techmonic, un 42 por ciento de los nacidos entre 1982 y 1994 son partidarios de comer en un restaurante de alta cocina al menos una vez al mes. Por esto y por otras razones de las que hablamos en este artículo nos preguntamos, ¿son los millennials el inicio de una alimentación más sana?
Millennials y la pasión por la alimentación
La revolución gastronómica está teniendo un cambio profundo en la generación del milenio. Tanto es así que las personas entre los 24 y los 36 años han convertido en la nueva moda visitar los restaurantes dirigidos por chefs de renombre. De hecho, su asistencia a éstos es incluso dos veces más alta que la generación baby boomers . Los resultados de estudios lo detectan, comen fuera y mucho (al contrario que sus padres quienes preferían comer en casa). ¿Las razones detrás de esto? Por lo visto, pese a que algunos los consideran la generación ‘desprotegida’ -pues no se preocupan por la pensión-, los millennials saben priorizar el valor sobre la conveniencia y la asequibilidad. Por ello, no escatiman en gastar dinero en un buen restaurante, especialmente si esto beneficiará a su salud pues es la primera generación que se está preocupando realmente por esta.
La primera vez que escuchamos de ellos fue bajo el término foodie, relatado en el libro “The Official Foodie Handbook ”, fue de la mano de sus autores Ann Barr y Paul Levy en 1984. Ellos, tal y como podemos leer en el artículo «Revolución Foodie: el amor por la comida», cambiaron el mundo, describieron a los foodies como millennials cuyo pasatiempo favorito es leer sobre comida, hablar sobre comida, comer platos elaborados y estar al tanto de las últimas tendencias de alimentación saludable. Lo cierto es que el impacto de esta nueva afición culinaria ha llegado a redes sociales, a la televisión con programas como Master Chef, a las conversaciones cotidianas e incluso al turismo con los viajes culinarios. Y es que ya son muchos quienes viajan a Perú para asistir al restaurante ‘Central’ o a Argentina para probar las hamburguesas de Mauro Colagreco en su restaurante ‘Carne’. Pero, ¿realmente los millennials, con su consciencia hacia la cocina sana, van a cambiar el mundo?
¿Un paso hacia una alimentación más saludable?
No necesariamente; y es que existen estudios que han determinado como las familias más pobres que consumen alimentos genéricos se mantienen saludables. Sin embargo, el movimiento foodie es algo diferente. Por lo visto aquellos que se consideran aventureros en la comida obtienen resultados más saludables en la salud. No cabe duda de que los millennials quieren evitar a toda costa las enfermedades crónicas de sus padres y abuelos a través de una alimentación más sana, pero no por eso menos deliciosa. De ahí sus preocupaciones hacia las dietas gourmet, las dietas veganas -que aportan niveles más bajos en grasas saturadas- y la inclusión de una gran variedad de alimentos para evitar deficiencias alimentarias. Y tú, ¿te has visto afectado positivamente por los millennials foodies? Si te has encontrado fotos como la siguiente, seguramente tu respuesta sea sí: